El día jueves 29 de febrero, mis compañeras y yo, visitamos dos escuelas: Escuela Básica N.º 1189 Sagrada Familia Y La Escuela Básica N.º 1633 Espíritu Santo.
Esta fue nuestra vez, realizando las visitas en el voluntariado reAcción. Mi prima y yo estuvimos muy emocionadas por esta nueva experiencia a la que nos adentramos, y desde el primer momento nos pusimos a total disposición de cualquier cosa que fuera necesaria.
Tuvimos la suerte de que no nos fue tan complicado llegar, ya que estábamos en una zona urbana, a diferencia de nuestros demás compañeros que tuvieron que ir a lugares complicados de llegar.
En la primera escuela, fuimos recibidas cálida y amistosamente por los directivos y profesores. Tuvimos la fortuna de que la directora esté presente, puesto que en la otra institución que visitamos, fuimos recibidas por la secretaria.
La directora, estaba hablando con quién creemos era un padre de familia, pero aun así, al notar nuestra llegada, dio una pequeña pausa para prestarnos atención. Con ayuda de una voluntaria que nos acompañó, nos presentamos y contamos el motivo de nuestra visita.
Animosamente, la directora nos puso al tanto de varias situaciones que ocurrían y nos expresó su alegría de poder tener la oportunidad de contar las carencias y falencias, que estaban siendo motivo de su quebranto.
Empezamos con algunas pequeñas preguntas y nos comentó sobre la falta de rubros docentes que impedía la habilitación del nivel medio, y que a pesar de que contaban con la infraestructura necesaria, se veían incapaces de habilitar nuevos grados.
Esta situación que nos comentó, vimos presente en varias escuelas, aparte de las que visitamos ese día.
También nos informó acerca de los kits escolares, y de su falta. Había alumnos que no tenían, y sus demás compañeros debían reponerse entre todos. Estas situaciones que nos presentó, son lamentablemente muy frecuentes en casi todas, por no decir todas, las instituciones educativas. Había kits escolares que tenían cuadernos demás y falta de lápices, o que de plano, no llegaban.
En la segunda y última escuela que visitamos, la situación era muy similar.
Fuimos recibidas amablemente por el portero al cual nos presentamos como voluntarias y explicamos nuestro motivo de visita. Al escucharnos, nos explicó que en esa institución, la falta de rubros era también un gran problema. Le pedimos permiso para entrar, y si nos podía indicar la oficina de la directora, pero al parecer la misma no se encontraba.
Aun así, quisimos entrar y conversar con alguna autoridad o persona consciente de los problemas vigentes.
Tuvimos la oportunidad de dialogar con la secretaria encargada. Nos enteramos de que por falta de rubros docentes, solo estaba habilitado el nivel medio en el turno mañana y que la ACE (Asociación Cooperadora Escolar) se estaba encargando de trabajos para poder solventar la compra de aires para las aulas. Algo decepcionante, pero no sorprendente. Una realidad que es muy frecuente, y que ocurre en muchísimas instituciones. Donde los padres y alumnos deben trabajar en intentar solventar cosas que, por obligación, el FONACIDE (Fondo Nacional de Inversión Pública), debería cubrir, pero no lo hace por diversas situaciones, tal como, la falta de visibilización.
Como en la institución anterior, también se encontraron dificultades a la hora de repartir los kits escolares, porque en algunos faltaba, o bien no venían y los alumnos quedaban sin materiales escolares.
Existen estos y muchos problemas más, pero lamentablemente son desconocidos por falta de visibilización y también son ignorados por las autoridades.
¿Cómo nosotros, los jóvenes, vamos a mover el país, si ni siquiera tenemos una educación apropiada?
¿Por qué estas situaciones se repiten en casi todas las instituciones y nosotros, que somos el objetivo de la educación, debemos reclamar?
¿Dónde están las autoridades que nos prometieron velar por nuestra educación?
Es nuestra obligación, como jóvenes y estudiantes, visibilizar y reclamar cada una de estas carencias y falencias que nos están perjudicando, a pesar de que se supone estas cosas no deberían pasar.
Nuestra experiencia fue gratificante y nueva, pero también nos hizo recordar que las injusticias están igual o más presentes que en años pasados y que no nos podemos quedar de brazos cruzados.
Esta anécdota es producto de las visitas a instituciones educativas en el marco de la campaña #DenunciáconFOCO. Los hechos y opiniones son enteramente de autoría y responsabilidad del voluntario, no reflejan necesariamente la postura de reAcción Paraguay ni la de la dirección del medio Quántico.
Gabriela Morinigo
Voluntaria Anticorrución
de Visitas #DenunciáconFOCO
iniciativa de reAcción.
